La ‘Policrisis’ de Svampa: Diagnóstico para un Planeta en Terapia Intensiva

Vivimos tiempos extraños, marcados por una sensación de dislocación permanente. Las crisis ya no se suceden en fila india, esperando su turno en el noticiero de la noche. Se superponen, se retroalimentan y se potencian mutuamente en una espiral que desafía nuestros marcos de comprensión. Es en este escenario de incertidumbre sistémica donde la voz de la socióloga Maristella Svampa emerge no como un oráculo, sino como la de una cartógrafa lúcida y valiente. Su reciente libro, "Policrisis", y la conversación que de él se desprende, ofrece un mapa conceptual indispensable para navegar la complejidad de nuestra era.

El término "policrisis" no es una mera etiqueta académica para describir la acumulación de problemas. Como Svampa desgrana, es un diagnóstico preciso de la interconexión patológica entre múltiples fallas sistémicas: la crisis socioecológica, la crisis de los modelos de desarrollo, la crisis de las democracias liberales y la crisis de los horizontes de futuro. No son crisis paralelas; son una sola y monstruosa hidra cuyas cabezas se regeneran con más virulencia.

---

---

Extractivismo Verde y Neocolonialismo

Uno de los ejes más potentes del análisis de Svampa es la desmitificación de las narrativas hegemónicas sobre la transición energética. Mientras el Norte Global enarbola la bandera de las "energías limpias", la socióloga nos obliga a preguntar: ¿limpias para quién y a costa de qué? La respuesta es tan incómoda como reveladora. La transición, tal como está planteada, no es más que una reconfiguración del extractivismo. Se reemplaza el petróleo por el litio, el cobalto y las tierras raras, pero la lógica de la depredación y el sacrificio de territorios en el Sur Global permanece intacta, e incluso se acelera.

El Vacío Político y el Ascenso de la Derecha Radical

La dimensión política de la policrisis es, quizás, la más visible en el día a día. Svampa ofrece una genealogía precisa de cómo hemos llegado hasta aquí. Analiza el ciclo de los gobiernos progresistas en América Latina, reconociendo sus avances en inclusión social, pero señalando su pecado original: la incapacidad de acometer reformas estructurales. Al consolidar su modelo en la expansión del extractivismo de commodities, estos gobiernos no alteraron la matriz de concentración de la riqueza, generando una eventual desilusión y abriendo un vacío de representación.

Es en ese vacío donde prolifera lo que ella denomina la "cuarta ola" de la derecha radical. Este no es un simple giro conservador. Svampa la caracteriza por su "polarización asimétrica": no se trata de un debate entre adversarios, sino de una campaña de deshumanización del oponente. El objetivo no es ganar una discusión, sino aniquilar simbólicamente al otro. Este fenómeno, amplificado por las cámaras de eco de las redes sociales, se normaliza y se desmarginaliza, logrando que discursos autoritarios, xenófobos y antipluralistas se instalen en el centro de la escena política.

La alianza de estas nuevas derechas con los superricos, beneficiarios de la desregulación y la aniquilación del Estado de bienestar, junto a su abrazo al negacionismo (climático, histórico, científico), completa un cuadro de época alarmante.

Argentina: Laboratorio del Capitalismo de Fragmentación

El análisis de Svampa aterriza con una precisión quirúrgica en el caso argentino bajo el gobierno de Javier Milei, al que define como un "experimento neolibertario". Aquí, la polarización asimétrica se convierte en política de Estado, ejecutada desde la más alta magistratura a través de la violencia verbal y la descalificación sistemática. Se busca instalar, según la socióloga, un "nuevo régimen afectivo" basado en la crueldad, la indiferencia y la falta de empatía como valores sociales deseables.

Este proyecto político se ensambla con una visión económica que Svampa, citando a teóricos como Peter Thiel, denomina "capitalismo de fragmentación". La idea de crear "zonas liberadas" de impuestos, regulaciones laborales y normativas ambientales para el gran capital encuentra en el RIGI (Régimen de Incentivo para Grandes Inversiones) su expresión más acabada. Argentina, en esta visión, se ofrece como un territorio de sacrificio, un "país liberado" para que las corporaciones transnacionales puedan operar sin las ataduras de la soberanía nacional o la justicia social. Es, en palabras de Svampa, una "narrativa pan-capitalista del fin", un proyecto que, en su colisión con los límites planetarios, se convierte en un "proyecto de muerte".

Imaginar Otros Horizontes

Pese a la dureza del diagnóstico, el pensamiento de Maristella Svampa no es una invitación a la parálisis. Por el contrario, es una llamada urgente a la acción desde la lucidez. Si la policrisis se alimenta de la fragmentación social y la anulación de la empatía, la salida solo puede ser colectiva y comunitaria.

"Policrisis" es, en definitiva, mucho más que un libro. Es una caja de herramientas conceptuales para desarmar la complejidad del presente. Es un espejo que nos devuelve una imagen cruda de nuestras contradicciones. Y, sobre todo, es la confirmación de que entender el mapa completo de la crisis es el primer paso ineludible para empezar a trazar una ruta de escape.